El río Bidasoa, poco antes de su desembocadura haciendo de frontera natural entre Francia y el País Vasco, bordea esta bonita localidad del norte de Navarra, asentada en un valle cubierto de vegetación y comunicada con el país vecino con abundantes senderos de montaña.
El núcleo histórico está formado por la monumental iglesia de San Esteban, que guarda en su interior un precioso órgano y que tiene a los pies un pequeño cementerio de laudas de piedra. Junto al templo ella se extiende la plaza del Ayuntamiento, presidida por este edificio neoclásico adornado con bonitas pinturas.
Paseando por Bera se descubren viejos caseríos entre los que destaca la literaria Casa Itzea, hogar familiar de los Baroja, que se instalaron aquí hacia 1912. El recuerdo del escritor Pío Baroja y su sobrino Julio Caro impregna este robusto caserón del siglo XVII en el que pasaron largas temporadas.