Umbralejo

En su condición de pueblo abandonado, Umbralejo ha sido objeto de una interesante labor de rescate dentro de un programa que pretende recuperar este tipo de pueblos para usos educativos. La localidad, ubicada en el valle del río Sorbe, disfruta de un conjunto arquitectónico muy armonioso, que mantiene buena parte de sus características tradicionales de piedra y pizarra, cuando el pueblo carecía de luz y agua corriente. El éxodo rural durante la década de los sesenta lo dejó casi vacío y una década más tarde su término fue expropiado para la repoblación forestal. El renacimiento llegó cuando fue transformado en un Aula de Naturaleza para la difusión de los valores medioambientales. En esa labor, han participado institutos y universidades y ha permitido la creación de un museo etnográfico, y la transformación de las casas en alojamientos, aulas, talleres y comedores.