Jimena de la Frontera

La fortaleza de Jimena de la Frontera corona la loma a la que se va amoldando este caserío blanco, en una zona poblada desde la Prehistoria, como acredita el cercano yacimiento de la Laja Alta y su conjunto único de pinturas rupestres. Con la invasión musulmana, Jimena se refuerza para servir de enclave estratégico y de aquella época es el castillo, en el que destacan los aljibes y las torres Albarrana y del Homenaje. Cerca está el legendario “baño de la reina mora”, que posiblemente sea el resto de una primitiva pila bautismal. El patrimonio religioso incluye varios templos y el santuario de Nuestra Señora de los Ángeles, del s. XV. En septiembre, la Estación de Jimena se convierte en la sede de un Festival Flamenco, que se ha convertido en una de las citas más importantes del cante en la provincia.